El genio superdotado que cayó inconsciente durante cinco días, tras descifrar los jeroglíficos egipcios
Jean-François Champollion fue un joven de 32 años, que logró contar a los sabios de la Academia de Inscripciones y Bellas Letras cómo descifró la compleja escritura egipcia “Piedra de Rosetta”. El 14 de septiembre de 1822, resolvió esta incógnita; su emoción fue tan grande que sufrió un síncope y perdió el conocimiento. Así mismo, se convirtió en el egiptólogo más famoso del mundo.
Apasionado por las lenguas orientales y la civilización de los faraones, Champollion obtuvo una réplica de la piedra de Rosetta y así comparó las tres versiones que poseía el texto. La versión griega le resultó fácil pero, gracias a su familiaridad con la cultura faraónica y su dominio idiomático, pudo ser más preciso a la hora de traducir cada fragmento.
El joven consiguió entender que el texto de la piedra de Rosetta contenía tres veces más signos que los textos griegos. Así, dedujo que los jeroglíficos no son sólo ideogramas, sino que también pueden servir como signo fonético al igual que las letras de nuestro alfabeto. Aplicando esta propia intuición a una transcripción extraída de un templo, detectó el nombre de Cleopatra.
Así es como el 14 de septiembre de 1822, gracias a la ayuda de un arqueólogo que le propició dibujos con inscripciones de otros monumentos, llegó a la exactitud de su descubrimiento, logrando reconocer los nombres de Ramsés y de Tutmosis. Allí fue cuando exclamó el grito de “¡Lo tengo!” y se desmayó; días más tarde, redactó, con ayuda de su hermano, un informe de 40 páginas sobre su hallazgo.
Luego de convertirse en una leyenda, el francés emprendió la redacción de una Gramática y un Diccionario de egipcio antiguo, hasta su joven muerte el 4 de marzo de 1832, a los 42 años. Sin embargo, gracias a su legado, sus sucesores pudieron leer, entender y traducir los jeroglíficos egipcios. Su increíble trayectoria generó numerosas vocaciones de egiptólogos en Francia y en el mundo.
Fuente: infobae.com (Claudia Peiró)
Imágenes: Wikimedia Commons - Jean-François Champollion / Public domain - Ptolomeo V Epífanes Dominio público - Jean-François Champollion / Public domain