Por qué los meteoritos robados son un tesoro para el contrabando

Por History Channel Latinoamérica el 04 de Junio de 2019 a las 18:59 HS

Un meteorito, claro está, es un trozo de roca espacial que puede provenir tanto de un asteroide, como de la luna o incluso de cualquier planeta del sistema solar. Al ingresar a la atmósfera terrestre, el meteorito sufre una presión extrema y su temperatura se eleva, a tal punto que comienza a desintegrarse. Cuando su tamaño o la consistencia son suficientes, el trozo de roca espacial logra atravesar la atmósfera sin desintegrarse completamente, e impacta contra la Tierra. Si se trata de un meteorito monitoreado, su recuperación es casi inmediata; pero si se trata de uno desconocido, entonces su recuperación es cuestión de suerte.

Si bien son muchísimos los meteoritos que llegan al planeta, muy pocos logran atravesar la atmósfera terrestre. Sobre esta minoría, es aún menor la cantidad de meteoritos que pueden ser monitoreados durante su ingreso, de tal modo que pude considerarse a cada roca espacial en la Tierra como a un bien escaso. El comercio de meteoritos no es legal en todas partes del mundo. Aquellos países que permiten su comercialización, basan los valores de una piedra espacial en torno a diversas variables, como el tamaño, el peso, la forma que adopta, aspectos científicos y su historia. Por ejemplo, son muy valorados los meteoritos en forma de parábola.

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Entre los materiales más valorados, se destacan las láminas y esferas de palasita, que poseen calidad de gema. Los meteoritos lunares, también son apreciados. Por este tipo de piezas, el mercado llega a pagar hasta 1 millón de dólares. Al mercado legal, se suma un mercado negro global que no para de crecer. Aprovechando Internet y el auge de las criptomonedas, la venta ilegal de rocas espaciales se expande constantemente. En el mercado negro, los trozos de meteorito son muy caros, especialmente cuando es posible documentar su procedencia. Si además se trata de rocas con altas concentraciones de algún material raro, cada gramo puede valer unos 200 dólares. En el caso de las rocas lunares, en el mercado negro pueden valer hasta mil dólares cada gramo.